Matrimonio bajo amenaza: [ MATRIMONIO GAY y DIVORCIO ]
En estos tiempos de confusión se ha levantado una voz en la
mayoría de las Iglesias en contra del matrimonio llamado “homosexual”. El
principal argumento es que va contra la Palabra de Dios.
Frente a tan directo ataque la Iglesia debe seguir
proclamando las verdades de Dios para la familia, pero también cavando más
profundo respecto del significado y propósito de lo que nosotros llamamos
“matrimonio bíblico”.
Muchos hermanos desde tiempos antiguos han señalado que la Biblia
contiene la revelación de Dios de manera progresiva, señalando que en el
Antiguo Testamento hay verdades que son sombra de lo que había de venir en el
glorioso Nuevo Testamento el cual es inaugurado con la venida de nuestro Señor
Jesucristo y posteriormente la gloriosa manifestación de su Iglesia.
Lo que en el Edén comenzó con un huerto al final de las
Santas Escrituras se transforma en una ciudad y así sucesivamente.
En la máxima mirada que pudo dar Pablo como también en el Apocalipsis
se describe a la Iglesia como la esposa que ha sido preparada para las bodas
del Cordero. Teniendo en cuenta esto podemos entender al apóstol cuando describía
el matrimonio como un símil de lo que pasa entre un hombre y una mujer cuando
hacen pacto de mutua unión delante de Dios.
Con lo anterior, no podremos entender lo que la Iglesia
significa para Dios en todo su esplendor a menos que veamos reflejado algo de
esa eterna unión en el matrimonio que Dios bendice.
En este sentido, la Iglesia se ha convertido en edificios,
instituciones o cualquier cosa por la carencia de manifestación en la tierra de
aquello que ya es una verdad eterna en el cielo.
Pablo exhorta a que el esposo y esposa asuman su rol y lanza
algo profundo: Amar a la esposa así como Cristo amó a la Iglesia. Lo que nos
lleva a AMPLIAR la visión que en la cruz Cristo moría y se entregaba por amor
NO sólo por cada uno de nosotros como individuos sino que por la Iglesia, su
novia.
Es en el matrimonio es donde vemos negada en su mayor
expresión nuestra individualidad al ser una sola carne.
Siendo solteros nuestras oraciones debían ser acompañadas
con una buena relación con el prójimo; ahora en el matrimonio debemos cuidar
que nuestras oraciones no tengan estorbo llevando una vida matrimonial limpia y
transparente con nuestra esposa o esposo.
Sencillo: Si nos enojamos con nuestro cónyuge y no hay
restauración Dios NO CONTESTA ninguna oración.
El cielo se cierra cuando lo que Dios diseñó se rompe.
Efesios
5:25-33Reina-Valera 1960 (RVR1960)
25 Maridos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó a la iglesia, y se
entregó a sí mismo por ella,
26 para santificarla, habiéndola purificado en el lavamiento del agua
por la palabra,
27 a fin de presentársela a sí mismo, una iglesia gloriosa, que no tuviese
mancha ni arruga ni cosa semejante, sino que fuese santa y sin mancha.
28 Así también los maridos deben amar a sus mujeres como a sus mismos
cuerpos. El que ama a su mujer, a sí mismo se ama.
29 Porque nadie aborreció jamás a su propia carne, sino que la
sustenta y la cuida, como también Cristo a la iglesia,
30 porque somos miembros de su cuerpo, de su carne y de sus huesos.
31 Por esto dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su
mujer, y los dos serán una sola carne.
32 Grande es este misterio; mas yo digo esto respecto de Cristo y de la
iglesia.
¿Qué mayor gesto de amor que entregarse por entero en
sacrificio?
Esa misma demanda Dios se la hace a los esposos.
¡Que tremendo!
No es sólo hacer cursos para tener un matrimonio estable o
feliz, sino que es el matrimonio la oportunidad de vivir en una pequeña expresión lo que vive Cristo con su Iglesia.
No son sólo las lecturas de las cartas paulinas, en los
matrimonios se debiera ver una pequeña luz de lo
que es la Iglesia para Cristo y Cristo para la Iglesia.
“El modelo a seguir
es la unión de Cristo con la Iglesia, por esa razón la revelación de este hecho
antecede a la unión matrimonial. No es la relación matrimonial la que nos
revela la unión de Cristo con la Iglesia sino exactamente al revés” Pastor Manuel
Muñoz
“Todo el aspecto
práctico del matrimonio debe derivar de la revelación de la unión de Cristo con
la Iglesia. Cristo modelo de esposo en su propósito, Palabra, cuidado y
sustento para con la Iglesia, si los hombres miramos a Cristo tendremos muy
clara la conducta a seguir” Pastor Manuel Muñoz
Mateo 19 Nueva Versión Internacional (NVI)
8—Moisés les permitió
divorciarse de su esposa por lo obstinados que son —respondió Jesús—. Pero no
fue así desde el principio. 9 Les digo que,
excepto en caso de infidelidad conyugal,
el que se divorcia de su esposa, y se casa con otra, comete adulterio.
En la versión NVI se señala que la causal para romper el
vínculo es la infidelidad. En muchos
lugares se ha tomado esta versión como norma permitiendo casarse nuevamente y
como consecuencia propagar el adulterio en el pueblo de Dios atrofiando el
modelo de Cristo con la Iglesia. Esto es grave porque si la Iglesia no vive el
modelo de Dios, ¿Cómo podremos dar esperanza a esta sociedad que no ve luz
ninguna respecto del matrimonio y la familia?
En la versión reina Valera la causal es fornicación “PORNEIA”.
No se refiere a como nosotros entendemos la
palabra fornicación “relaciones sexuales antes del matrimonio”.
Ejemplo:
1 Cor 5.1 de la traducción
Reina Valera 1960
De cierto se oye
que hay entre vosotros fornicación (PORNEIA), y tal fornicación
cual ni aun se nombra entre los gentiles; tanto que alguno tiene la mujer de su
padre.
Lo anterior nos indica que la causal de divorcio es mucho más
profunda, acotada y excepcional.
Pregunta: ¿Acaso no hay en el Cuerpo de Cristo suficiente
amor de Cristo para perdonar una infidelidad?
¿Acaso no hay en el Cuerpo de Cristo suficiente gracia de
Dios para acompañar la restauración?
¿Porque actuamos de manera tan liviana separando aquello que
Dios juntó y bendijo y luego lo “bendecimos para volver a casar” cuando las Escrituras
señalan otra cosa?
Lo que vamos concluyendo es lo siguiente:
El matrimonio que Dios bendice es el realizado de acuerdo a
sus principios y representa la eterna unión de Cristo con su Iglesia.
Sólo así bendeciremos a nuestras generaciones y a nuestra
tierra.
Gente en el liderazgo que es re-casado, ¿Cómo enseñará sobre el
camino para cumplir el propósito de Dios en el matrimonio y la familia?
Incluso se va mas allá en muchos lugares delegando a
personas re-casadas en lugares reservados para “maridos de una sola mujer”
Sin desconocer que hay gente divorciada, es tiempo de
asentar bases firmes en los matrimonios que nacen en la Iglesia de tal forma
que la palabra divorcio no esté en nuestra agenda, sino que el perdón,
sacrificio, santidad y honestidad.
Las ultimas frases:
EN ESTE TIEMPO.
Para nadie es un misterio que la Iglesia está bajo un feroz
ataque en estos días, un ataque de los infiernos tal cual se nos señala en Apocalipsis
12 hablando de la mujer. Me uno a aquellos que interpretan así:
En el Nuevo Testamento, el
símbolo de la mujer representa a la Iglesia, cuyos miembros se comparan con
vírgenes (Mateo 25:1-13; Apocalipsis 14:4; 19:7). La Iglesia también recibe el
nombre de “Israel de Dios” y “la Jerusalén de arriba”, que es “madre de todos
nosotros”, y los miembros son “linaje escogido, real sacerdocio, nación santa,
pueblo adquirido por Dios” (Gálatas 6:16; 4:26; Hebreos 12:22-23; 1 Pedro 2:9).
La proliferación del llamado
matrimonio homosexual apunta a cambiar la naturaleza de la Iglesia y de Cristo,
donde el divorcio expandido apunta a destruir aquella unión que es
indestructible.
El desafío es:
Desde la niñez y desde que
nos convertimos debemos tener certeza de que pertenecemos a la Iglesia del
Señor y juntos conformamos a novia de Cristo. De tal manera que si un día
pretendemos como solteros casarnos eso es mucho más que anillos y fiesta, es
traer el cielo a la tierra, luz en medio de tinieblas.
Si la gente viene destruida,
sin casarse o casadas múltiples veces debemos mostrar el corazón del Padre
perdonador y restaurador pero jamás dejar de proclamar a nuestras generaciones
que Dios nos dará la victoria y los diseños de Dios prevalecerán.
“La importancia de creer que los diseños de Dios son perfectos. El
matrimonio funciona cuando está ajustado al modelo inicial. Por eso la
importancia de revelar el modelo y mantener la pureza de su diseño. Debemos
temer si pretendemos introducir elementos extraños u omitir aspectos originales
de la configuración del matrimonio entre los hombres] Pastor Manuel Muñoz
Alberto Rojas J.
Octubre 2015
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